Una de las razones por las que decidí no tener crías fue saber que el mundo en el que vivimos y conocemos terminará pronto.
Sufro de ecoansiedad.
La American Psychology Association describe la ecoansiedad como “el temor crónico a sufrir un cataclismo ambiental que se produce al observar el impacto irrevocable del cambio climático y la preocupación asociada por el futuro de uno mismo y de las próximas generaciones”.
Y cada vez que leo una noticia sobre la crisis hídrica en México, la extinción de algunas especies, las olas de calor, los incendios que acaban con los bosques, las inundaciones que destruyen pueblos y ciudades, dejo de respirar por un momento y me paralizo. Cuando vuelvo a respirar confirmo “tomé la mejor decisión para mi vida”, sabiendo que tengo ansiedad, definitivamente no hubiera sido nada bueno para mí ser madre.
Sin embargo, en cuanto vuelvo a respirar pienso en mis sobris, pienso en mis amigas, primas, y mujeres que son mamás, y me sale un gran “chale” ni nosotras ni las futuras generaciones se merecen el mundo que les estamos dejando. Es por ello que regresa a mi el optimismo para cambiar, para hacer y para exigir, todas las personas y existencias habitamos este maravilloso planeta y aunque en mi caso haya decidido no ser madre siento una gran responsabilidad para con todas las existencias de dejar un mejor mundo.
Platicando esta situación con mi adorada cofundadora de Nunca Madres, Isa, investigamos sobre un movimiento de mujeres que ha decidido no procrear en respuesta al inminente colapso climático. Blythe Pepino, una mujer británica decidió anunciar públicamente su decisión, haciendo estratégicamente lo personal político, al crear BirthStrikers, una organización voluntaria para mujeres y hombres que han decidido no tener hijes en respuesta al inminente "colapso climático y de la civilización".
Al hacerlo, espera canalizar el dolor que siente por su decisión "en algo más activo, regenerativo y esperanzador". En solo dos semanas, 140 personas, en su mayoría mujeres en el Reino Unido, han declarado su decisión de no tener hijos debido a la gravedad de la crisis ecológica. Pepino dice que BirthStrikers es distinto del movimiento antinatalista, su objetivo no es desalentar a las personas de tener hijes, ni condenar a quienes ya les tienen, sino comunicar la urgencia de la crisis.
Cierro esta pequeña reflexión con un mensaje esperanzador que nos lleve a todas las personas a tener un poco más de consciencia de cómo nuestros hábitos y acciones pueden mejorar a nuestro hogar, así como exigir a los gobiernos y a las industrias que modifiquen su forma extractivista de ver a la madre naturaleza.
Por nosotras, y por las personas y existencias que vienen.
Ecoansiedad y la no maternidad por elección
Irán S
Nunca Madres
Comentarios